decaerá mi sustancia y todo aquello en lo que fui terreno,
pero si me tocas, ya con la vana brisa de un recuerdo,
se sacudirá aún la sombra eterna de mi tumba
Rodó breve en una inmensa oscuridad silente, desapareció fugaz en un sólo gesto de la mano, más bastó la canción efímera de su vida para que el corazón se contristara ... en la inconmensurable soledad
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